En esta etapa de la pandemia, todos están familiarizados con la larga lista de desafíos que enfrentan las empresas de todo el mundo: clientes nerviosos, rotación de empleados, cuellos de botella en la cadena de suministro, etc. Al igual que las propias variantes de COVID-19, estos desafíos continúan tomando nuevas formas con consecuencias a veces inciertas.
En 2022, con muchas marcas pequeñas y medianas que adoptan estrategias de publicidad digital por primera vez, un desafío clave es superar el ruido creado por este cambio en los comportamientos de los consumidores y la actividad de marketing posterior.
En Semrush, donde nuestro negocio es ayudar a las marcas a administrar su visibilidad en Internet, enfrentamos este mismo problema cuando nos dispusimos a promocionar nuestro propio producto de nicho con un embudo complejo.