Si bien algunas marcas dan prioridad a la diversidad, la equidad y la inclusión en sus mensajes y campañas de marketing, es posible que falte un componente esencial de la inclusión: la accesibilidad.
Es especialmente importante atender a las personas que normalmente están desatendidas en el mundo digital. Por ejemplo, las personas ciegas o con baja visión, sordas o hipoacúsicas, neurodivergentes o con problemas motores. Estas personas a menudo enfrentan barreras cuando una experiencia no está diseñada adecuadamente. Los viajes en línea a menudo son experiencias complicadas para las personas, y las marcas deben asegurarse de que sus aplicaciones y sitios web no agreguen más complicaciones.
La creación de experiencias de usuario accesibles pronto se convertirá también en un requisito normativo. Este año, los estados miembros de la Unión Europea están adoptando la Ley Europea de Accesibilidad en sus leyes.